Miramos las nubes y buscamos formas familiares en ellas, cuando notamos una nube de diferente apariencia a las demás. Esta parece ser transparente, como un gigantesco globo, como lleno de agua. Se pueden ver unas ondulaciones moviéndose en su interior. Sorprendidos y atónitos miramos la nube mientras se desplaza por encima del mar lentamente en la lejanía, pasado la montaña de sal que está en la playa, sin poder entender lo que estamos viendo. De pronto vemos como unas pequeñas esferas de igual apariencia a la gigantesca nube, pero de mucho menor tamaño, se mueven a velocidad en torno a esta.
Sin poder decir nada nos miramos los unos a otros, cuando algunas de las esferas súbitamente cambian de dirección y se dirigen hacia nuestro barrio. Despavoridos corremos hacia adentro de la casa donde comenzamos a cerrar todas las ventanas y puertas. Al hacer esto perdimos vista del gigantesco globo y las pequeñas esferas, pero asumimos que de alguna manera habían detectado nuestra presencia, y el hecho de que las estábamos mirando. Frank, por razón que desconozco, se montó en su Pathfinder verde oscuro y se marcho a prisa sin decir palabra.
Todo sucede rápidamente. Mientras miro por una ventana entreabierta puedo observar las esferas volar sobre Tallaboa. En ese momento me viene a la mente una experiencia que tuve cuando niño. Me encuentro yo durmiendo en mi cuarto de la casa de la Primera Calle, el cual da hacia el frente de la estructura. Mientras duermo siento un temblor y vibración seguidos por una explosión, los cuales me despiertan, abro los ojos. Al hacerlo puedo ver un brillante resplandor por las rendijas de la ventana, como si hubiera un incendio afuera. Yo me siento en fuego, quemándome, estoy bañado en sudor. Al abrir la ventana, puedo observar unas grandes llamas en las refinerías, en el área donde se encontraba el garaje de gomas de El Cubano. Todo el cielo está iluminado con las gigantescas llamaradas, las cuales noté eran reflejadas en
el brillante casco de una nave gigantesca que flotaba sobre el área del incendio. Atemorizado cerré la ventana y me acosté mientras escuchaba las sirenas de los camiones de bombero y ambulancias pasar por la carretera. Nunca le conté lo que vi a nadie.
Recordando ese evento pienso, esta nos es la primera vez que veo cosas extrañas en el cielo, así que no puedo estar imaginándome esto. Tambien me viene a la mente una conversación con mi gran amigo Luisito, el cual es pescador y suele pasar muchas noches en alta mar. Me contaba el que mientras pesca junto a mi concuñado Noé, y otros pescadores, han visto luces extrañas en el cielo, las cuales actúan y se mueven de manera que ninguna nave aérea conocida podría volar. No se lo cuentan a nadie pues pensarían que están locos, pero el sabe que no estamos solos.
En otra ocasión, mientras visitaba a mi hermano Tony en West Palm Beach, Florida, mi esposa Lucy salió en el auto con mis dos niños, y los hijos de mi hermano. Sucede que mi hermano vive cerca del aeropuerto de la ciudad, y mientras Lucy conducía a través del Southern Boulevard, el cual corre paralelo al sur del aeropuerto, pudieron avistar una esfera que viajaba a rápida velocidad sobre el aeropuerto. No era un avión ni un helicóptero, afirmaron todos. La esfera era transluciente y como rodeada por fuego y humo. Todos quedaron tan impresionados que al llegar a la casa entraron corriendo y con una gritería, por lo que pensamos que eran seguidos por un asaltante.
Recuerdo también otra historia que escuché en la que el nieto de la anciana señora que vivía al lado de Vicente Borrero en la Tercera Calle, relato haber observado luces extrañas en los montes de Tallaboa, en dirección al área donde está el Lago de Modesto. Aseguraba el haber visto luces descendiendo y ascendiendo en las cercanías del lago. Tal vez esto explica algunas de las historias respecto al “El Monstruo de la Laguna”.
Ciertamente que son muchas las historias de eventos similares. En otra ocasión, mientras participamos en una actividad en el barrio, no sé si era un velorio, o algo de la iglesia, me encontraba junto a Frank y creo que Johnny. Estábamos en la Segunda o Tercera calle cuando recuerdo que vimos unas luces bien alto en el cielo, directamente sobre el área donde nos encontrábamos. Eran dos o tres cosas volando como en círculos, que aunque daban la apariencia de ser aviones, su velocidad y características decían lo contrario. No recuerdo si alguien más se percato de lo sucedido, pero creo que Frank y Johnny si lo notaron. Pensaba en si todos estos eventos estaban relacionados y si tendrían algún significado.
A los pocos minutos de Frank irse de la casa, veo su auto regresar. De él se bajan cuatro personas, dos hombres y dos mujeres de baja estatura y apariencia extraña vestidos formalmente. Aunque parecen humanos, su piel es pálida, y sus semblantes carecen de expresión alguna. Tienen una mirada penetrante. Intentan entrar a la casa, pero yo los rechazo repetidamente, mientras les pregunto que dónde está Frank, que le hicieron a él. Sin mediar palabra, telepáticamente, me comunican que han venido en son de paz, en busca de una nave, de unos compañeros que desaparecieron en los alrededores de nuestro barrio. Pasan por mi mente todos los relatos que les he contado anteriormente, los cuales ellos pueden leer. Entienden que nos sabemos nada respecto a sus compañeros perdidos, y sin decir palabra se marchan, dejándome saber que llevan mucho tiempo en nuestro planeta y que algún día volverán a encontrarme.
No veo a dónde se dirigen, pero a los pocos minutos llegan varios vehículos con unos oficiales de la Fuerza Aérea, junto con otros agentes federales e invaden la casa. Son muchos, por lo que dudaba de su verdadera identidad. Me identifico como oficial de inteligencia, y exijo ver sus credenciales para comprobar su identidad. Les indiqué lo sucedido y le expliqué lo que los seres me comunicaron. Los oficiales me indicaron de manera secreta que sabían de la existencia de estos seres por lo que los estaban siguiendo desde mucho tiempo. Me pidieron que les informara sobre cualquier nuevo avistamiento o contacto con los seres.
¿Que paso con Frank? Todavia los estamos esperando.
Para leer la segunda parte click aqui: Otro Día en "Paradiso": Encuentro Cercano en Tallaboa, Segunda Parte
Para leer la segunda parte click aqui: Otro Día en "Paradiso": Encuentro Cercano en Tallaboa, Segunda Parte
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